miércoles, 24 de abril de 2013

Muebles y estilos aparentemente opuestos: la mezcla es la clave



Delicados y antiguos adornos en la pared junto a un atrevido puf tapizado en animal print, clásicos muebles franceses junto a unas butacas camufladas... Este piso es un universo donde reina un mix de culturas, épocas y estilos con un resultado súper personal. ¿Un plus? Sus increíbles vistas.


Decoración atrevida. Tapizados en terciopelo rojo y en print trigre: todo un atrevimiento decorativo para el living. Tras el puf atigrado, mesa en laca negra diseñada por el decorador. En la pared, cuatro placas de escayola, de un mercado de París, enmarcadas en cuadros y bodegones.

Unas placas antiguas de escayola delicadamente enmarcadas junto a un atrevido puf tapizado en print de tigre; un banco clásico francés junto a unas butacas de mimbre preparadas para dar guerra con su tapicería de camuflaje; unas sillas que son pura sencillez junto a una escultura enorme con forma de cabeza de hipopótamo. ¿Cómo pueden convivir todas estas piezas en el mismo espacio y que el resultado sea un acierto?



Históricas vistas. La vivienda tiene unas preciosas vistas al madrileño Palacio de Oriente. El mirador con mesita con cuencos; sillas tapizadas con piqué; cohete.

El propietario de este piso ha conseguido meter en una coctelera muebles, objetos y estilos aparentemente opuestos y sacudirlos hasta elaborar un combinado súper personal que sabe a osadía, creatividad y diversión.



Living. Aquí se destaca el puf ovalado, diseño del decorador, tapizado con una tela con print de tigre.



En el rincón, sofá tapizado en algodón, y lámpara años 60.



En el pasillo se suceden las obras de arte.



En el recibidor, cabeza de hipopótamo en fibra de vidrio; alfombra; sillas; consola de wengé y puf de mimbre diseñados por el decorador.



Diseño propio. Junto a un sillón adquirido en Londres y tapizado en terciopelo rojo, chaise longue, diseño del decorador.



Comedor. En torno a la mesa del comedor, banco antiguo francés tapizado en algodón; butacas de bambú tapizadas en tela de camuflaje, por el decorador.



Contrastes. Un banco antiguo, butacas de camuflaje, papel pintado clásico, pintura expresionista... ¡puro contraste! La mesita roja, con lámpara de hierro y pantalla negra. En las paredes, obra en acrílico y zócalo en papel.



Detalles. En la cocina, el decorador colocó un mueble alacena de hierro con rejilla adquirido en París.




Para la cocina eligió un mueble de madera de Ikea.



En el dormitorio, alfombra; silla diseñada por el decorador; huevo en paño rojo, de Philippe Stark.



Dormir con clase. Almohadones; cuadro y obras fotográficas.



En el baño, revestimientos de piedra caliza crema y obras de diferentes artistas.



En el cuarto de invitados, tejido bordado, mesitas antiguas compradas en Málaga y lamparitas adquiridas en Estocolmo.